A través de esta pieza de grotesco criollo los autores dejan ver las miserias en el seno familiar, donde la pelea por salvarse de la pobreza y el fracaso dejan muy en claro desde dónde venimos y hacia dónde vamos como país.
La familia Bistoldi, acostumbrada a la riqueza, se encuentra sumida en una pobreza que los avergüenza. Arturo es el mayor, un adicto a las carreras que se comió la fortuna de su padre y se desloma por mantener a sus hermanas y su mujer, Matilde, hija de un Coronel de renombre, que sólo sabe tocar el piano.
Jorgelina, la hermana del medio, es bella y arrogante, y no logra que su novio, Emilio, le proponga casamiento porque espera un puesto que jamás le darán. Esther María y María Esther, son las gemelas menores, cuyo único placer es criticar a quienes más envidian.
Giácomo, es el tío empobrecido quien acepta los maltratos de sus sobrinos a cambio de un catre y polenta fría, cuyo único propósito es cuidar su más preciado secreto dentro de un baúl. Sólo cuenta con la piedad de Catalina, una sirvienta opa e inocente de gran corazón.
La vida de los personajes de esta obra, cambia con la llegada de Eloísa, amiga de antaño de Don Giácomo y madrina de Arturo, quien asqueada del maltrato a su amigo, decide vengarse por él y develar el "mayor secreto" que se esconde en el baúl.
Una vez más, la pluma de Discépolo, nos regala esta obra con la vigencia que tienen los clásicos universales, y bien amalgamada con la realidad sociocultural de esta querida y vapuleada Argentina.
Hola gente, espero se acuerden de mi aun. Los quería felicitar por el emprendimiento teatral, ya hace 2 años no los veo actuar, seguro han crecido un montón. Si no surgen imprevistos ahí estaré el domingo para aplaudirlos. Mucho éxito, merde o como prefieran. Besos y abrazos.
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